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Adiós a las dietas hipocalóricas: ¿Por qué no funcionan a largo plazo?
Las dietas hipocalóricas, esas dietas que nos limitan a comer menos calorías de las que nuestro cuerpo necesita, suelen ofrecer resultados rápidos pero a menudo no son la solución sostenible para controlar el peso. En nuestro Centro de Psiconutrición, te ofrecemos un enfoque diferente para abordar este problema de manera más integral.
El efecto rebote: ¿Por qué no podemos mantener el peso después de una dieta hipocalórica?
Más del 90% de las personas que siguen una dieta hipocalórica terminan fracasando a largo plazo, y dos de cada tres vuelven a ganar el peso que habían perdido. ¿Por qué ocurre esto? Las dietas bajas en calorías y grasas no solo afectan nuestro cuerpo, sino también nuestra mente. Los estudios clínicos han demostrado que estas dietas pueden desencadenar efectos secundarios perjudiciales, como el conocido «efecto rebote», que se presenta de diversas formas:
- Metabolismo más lento: Reducir las calorías hace que nuestro metabolismo se desacelere, creando la sensación de que «todo lo que como me engorda».
- Estrés crónico: La constante restricción genera estrés, que interrumpe la regulación de la glucosa en nuestro cuerpo, aumentando el deseo por alimentos con muchas calorías y contribuyendo a la acumulación de grasa.
- Señales alteradas de hambre y saciedad: Las dietas extremas pueden hacer que nuestras señales de hambre y saciedad se desajusten.
- Pérdida de masa muscular: Al reducir las calorías, el cuerpo también puede perder músculo, lo que empeora aún más el metabolismo.
El impacto emocional de las dietas restrictivas
Las dietas hipocalóricas no solo afectan el cuerpo, sino también la mente. Muchas personas que siguen estas dietas sienten que han fracasado cuando no logran mantener el peso a largo plazo. Este sentimiento de culpa y frustración puede dañar la autoestima y fomentar un ciclo de restricciones alimentarias, lo que a menudo lleva al comer emocional o compulsivo. Así, la relación con la comida se convierte en un terreno de lucha constante, que puede llevar a trastornos de la conducta alimentaria.
Psiconutrición: la alternativa para romper el ciclo de las dietas
La psiconutrición ofrece una forma diferente de abordar el control del peso. Es una alternativa que tiene en cuenta no solo lo que comemos, sino cómo nos relacionamos con la comida y con nosotros mismos. Es ideal para aquellos que han estado a dieta durante años, que luchan contra la fuerza de voluntad o que experimentan el vaivén constante entre el control y el descontrol alimentario. También es una opción válida para quienes padecen obesidad o sobrepeso y buscan una solución sostenible que no dependa de restricciones extremas ni de la culpa.